El vínculo afectivo entre animales y niños en el sala cuna/jardín St. Joseph crece y otorga buenos resultados dentro de los procesos de formación de valores de cuidado y autocuidado que le imparten el personal pedagógico de dicha institución, acciones que se sustentan en las forma de aprendizaje RIE (recrear, innovar, evangelizar).

Es por ello que para inculcar responsabilidades afectivas, los niños del St. Joseph comenzaron a albergar en sus casas durante los fines de semanas, parte de los animales domésticos que conforman la Granja Educativa inaugurada en dicho jardín.

Fue así como Benjamín fue el primero en llevar a su casa a los dos conejos que forman parte de la iniciativa formativa, actividad que fue acogida de buena manera por parte de los apoderados.

Según las declaraciones de Carolina Guzmán, directora del Jardín St. Joseph, de esta forma -y de manera didáctica- los educandos aprendan sobre el cuidado y autocuidado, asumiendo responsabilidades como la protección y alimentación de estos animales.

De igual forma-y con la implementación de todas las medidas de seguridad correspondientes- se desarrolló una fiesta con temática zoológica en el patio de juegos del jardín, donde se llevó para la interacción con los niños un grupo diverso de animales que se convirtieron en el centro de atención de dicha fiesta.

Fue así como los niños del St. Joseph jugaron e interactuaron con animales tan exóticos como serpientes, iguanas y tortugas, entre otros reptiles, maniferos y aves.

Los niños -encantados por la atipicidad de estas actividades- mostraron un mayor apego y simpatía por los animales y este mundo totalmente desconocidos para citadinos, sedimentando en ellos un sentimiento ambientalista y de cuidado por la fauna muy importante.